Una
Plaça de Baix abarrotada, mas de 3500
personas según fuentes oficiales, fue
testigo de la coronación canónica de la Virgen de los Dolores, conocida popularmente
en Elche como la Mare de Deu de les Bombes, nombre al que a partir de la fecha
le seguirá el apelativo de “Coronada”.
El
acto fue presidido por el Obispo de la diócesis, Don Rafael Palmero, asistiéndole
el vicario general, vicario episcopal y sacerdotes de las parroquias ilicitanas.
Don
Rafael en su homilía previa a la coronación, argumentó los motivos que le llevaron a conceder la
coronación y resumió las connotaciones tanto culturales como litúrgicas que
tenia esta coronación que era “canónica” porque se realizaba “…según los Cánones
de la Santa Iglesia Católica, como Dios manda…”
Esta
ceremonia tuvo como padrinos de Honor a Sus Majestades los Reyes de España,
credencial de lo cual se hizo lectura al finalizar el acto, antes de que el
Hermano Mayor, Don Francisco Javier Guilabert, acompañado de la Alcaldesa de Elche y los
Padrinos y Testigos accedieran al altar para rubricar junto al Señor Obispo el
acta de la Coronación de Nuestra Señora de los Dolores.